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sábado, 22 de febrero de 2014

Origen del Conocimiento Humano



Objetivo: Identificar las distintas escuelas filosóficas que abordan el problema del Origen del conocimiento humano.

¿Es la Razón o  la experiencia la fuente y base del conocimiento humano? Esta es la cuestión del ORIGEN DEL CONOCIMIENTO HUMANO. (El racionalismo. El Empirismo. El Intelectualismo. El Apriorismo)

Si formulamos el juicio: ¨ el sol calienta la piedra¨, lo hacemos fundándonos en determinadas percepciones. Vemos cómo el ilumina la piedra y comprobamos tocándola que se calienta paulatinamente. Para formular este juicio, nos apoyamos en los datos de nuestros sentidos –la vista y el tacto- o, dicho brevemente, en la experiencia.

Pero nuestro juicio presenta un elemento que no está contenido en la experiencia. Nuestro juicio no dice  meramente que el sol ilumina la piedra y que ésta se calienta, sino que afirma que entre estos dos procesos  existe una conexión íntima, una conexión causal. La experiencia nos revela que un proceso sigue al otro.

Nosotros agregamos la idea de que un proceso resulta del otro, es causado por el otro. El juicio: ¨el sol calienta la piedra¨ presenta según este, dos elementos, de los cuales el uno procede de la experiencia, el otro del pensamiento. Ahora bien, cabe preguntar: ¿cuál de estos dos factores es el decisivo? La conciencia cognoscente, ¿se apoya preferentemente, o incluso, exclusivamente, en la experiencia o en el pensamiento? ¿De cuál de las fuentes de conocimiento saca sus contenidos? ¿Dónde reside el origen del conocimiento?
 
1.   El Racionalismo: la posición epistemológica que ve en el pensamiento, en la razón, la fuente principal del conocimiento humano, se llama racionalismo (de ratio = razón).
Según el racionalismo, un conocimiento sólo merece, en realidad, este nombre cuando es lógicamente necesario y universalmente válido. Cuando nuestra razón juzga que una cosa tiene que ser así, y que no puede ser de otro modo; que tiene que ser así, por tanto, siempre y en todas partes, entonces, y sólo entonces, nos encontramos ante un verdadero conocimiento, en opinión del racionalismo. Un conocimiento semejante se nos presenta, cuando formulamos el juicio ¨el todo es mayor que las partes¨, o el juicio ¨los cuerpos son extensos.¨ En ambos casos vemos con evidencia que  tiene que ser así y que la razón se contradiría a sí misma si quisiera sostener lo contrario. Y porque tiene que ser así, es también siempre y en todas partes así.
Estos juicios poseen una necesidad lógica y una validez universal rigurosa.
Cosa muy distinta sucede, en cambio, con el juicio ¨todos los cuerpos son pesados¨, o el juicio ¨el agua hierve a 100 grados¨. En éste caso sólo podemos juzgar que es así, pero no tiene que ser así. Es perfectamente posible que el agua hierva a una temperatura inferior o superior; y tampoco significa una contradicción interna representarse un cuerpo que no posea peso, pues la nota del peso no está contenida en el concepto de cuerpo. Estos juicios no tienen pues, necesidad lógica. Y, asimismo, les falta la rigurosa validez universal.

Estos juicios son válidos pues, dentro de los límites determinados. En estos juicios nos hallamos atenidos a la experiencia.
Los juicios fundados en el pensamiento, en la razón, poseen necesidad lógica y validez universal; los demás, por el contrario, no. Todo verdadero conocimiento se  funda, según esto –así concluye el racionalismo-, en el pensamiento. Éste es, por ende, la verdadera y fuente base del conocimiento humano.
El conocimiento matemático es un modelo de la interpretación racionalista del conocimiento, en donde el pensamiento impera con absoluta independencia de toda experiencia, siguiendo sus propias leyes.
El mundo de la experiencia se encuentra en un continuo cambio y mudanza. Consiguientemente, no puede procurarnos un verdadero saber. Los sentidos no pueden  conducirnos nunca a un verdadero saber. Les debemos una mera opinión.
La teoría de las ideas innatas, que aparece en la edad moderna con Descartes, según ella,  nos son innatos cierto número de conceptos, justamente los más importantes, los conceptos fundamentales del conocimiento. Estos conceptos no proceden de la experiencia, sino que son originarios de la razón.

2.   El Empirismo (experiencia): opone a la tesis del racionalismo (según la cual el pensamiento, la razón, es la verdadera fuente del conocimiento) la antítesis que dice: la única fuente del conocimiento humano es la experiencia.
La conciencia cognoscente no saca sus contenidos de la razón, sino exclusivamente de la experiencia. El espíritu humano está por naturaleza vacío; es una tábula rasa, una hoja de escribir y en la que escribe la experiencia. Todos nuestros conceptos, incluso los más generales y abstractos proceden de la experiencia.
El niño empieza por tener percepciones concretas. Sobre la base de estas percepciones llega paulatinamente a formar representaciones generales y conceptos. Estos nacen, por ende, de la experiencia. No se encuentra  nada semejante a esos conceptos que existen acabados en el espíritu    o se forman con  tal independencia de la experiencia. La experiencia se presta pues, como la única fuente del conocimiento.
En las ciencias naturales está representada la defensa de su tesis, ya que las ciencias naturales, la experiencia representa el papel decisivo. En ellas se trata, sobre todo, de comprobar exactamente los hechos mediante una cuidadosa observación. El investigador está completamente entregado a la experiencia.

 El fundador del empirismo es John Locke (1632-1704). Combate con toda decisión la teoría de las ideas innatas. El alma es un  ¨papel en blanco¨ que la experiencia cubre poco a poco con los trazos de su escritura. Reconoce en la esfera matemática un conocimiento independiente de la experiencia y, por ende, universalmente válido. Todos los conceptos de este conocimiento proceden también de la experiencia, pero las  relaciones existentes entre ellos son válidas independientemente de toda experiencia.

3.   El Intelectualismo: El racionalismo y el empirismo son antagónicos. El intelectualismo media entre ellos, afirmando que  ambos factores tienen parte en la producción del conocimiento.
El intelectualismo sostiene con el racionalismo que hay juicios lógicamente necesarios y universalmente válidos, y no sólo sobre los objetos ideales, sino también sobre los objetos reales.
De este modo, la experiencia y el pensamiento forman juntamente la base del conocimiento humano.
Esta teoría ha sido desarrollada en la Edad Media por Santo Tomás  de Aquino. La tesis fundamental de ésta dice: empezamos recibiendo de las cosas concretas imágenes sensibles. El intelecto extrae de ellas las imágenes esenciales generales. El intelecto recibe en sí éstas y juzga sobre las cosas. De los conceptos esenciales así formados se obtienen luego, por medio de otras operaciones del pensamiento, los conceptos supremos  y más generales.

4.   El Apriorismo: es un segundo intento de mediación entre el racionalismo y el empirismo. También éste considera la experiencia y el pensamiento como fuentes de conocimiento. Pero el apriorismo define la relación entre la experiencia y el pensamiento en un sentido contrario al intelectualismo.
Nuestro conocimiento presenta elementos a priori, independientes de la experiencia, siendo factores de naturaleza formal. No son contenidos, sino formas del conocimiento. Estas formas reciben sus contenidos de la experiencia.

Los factores a priori semejan, en cierto sentido, recipientes vacíos que la experiencia llena con contenidos concretos. El principio del apriorismo dice: ¨Los conceptos sin las intuiciones están vacíos; las intuiciones sin los conceptos, están ciegas
Hay un factor racional y un factor empírico en el conocimiento humano.
El factor a priori no procede de la experiencia, sino del pensamiento, de la razón.
Preguntas al Texto:

1.   ¿Por qué es importante y fundamental conocer acerca del origen del conocimiento: si éste es producto de la experiencia o producto de la razón, si ¨vulgarmente¨ aprehendemos o conocemos, sin ¨importar¨ (aparentemente) la fuente?
2.   Explique el siguiente concepto expresado por el empirismo con respecto al conocimiento matemático: “Reconoce en la esfera matemática un conocimiento independiente de la experiencia y, por ende, universalmente válido. Todos los conceptos de este conocimiento proceden también de la experiencia, pero las  relaciones existentes entre ellos son válidas independientemente de toda experiencia.
3.   Explique brevemente la posición planteada  por el Racionalismo.
4.   Explique brevemente la posición planteada  por el Empirismo.
5.   Explique brevemente la posición planteada  por el Intelectualismo.
6.   Explique brevemente la posición planteada  por Apriorismo.
7.   ¿Cuáles son las condiciones requeridas para que un conocimiento sea verdadero, según el Racionalismo? Explique mediante un ejemplo.
8.   ¿Quién es René Descartes y cuál es su aporte al conocimiento de la humanidad?
9.   ¿Quién es Tomás de Aquino y cuál es su aporte al conocimiento humano?
10.                ¿Quién es John Locke y cuál es su aporte al conocimiento de la humanidad?
11.               ¿Quién es Emmanuel Kant y cuál es su aporte al conocimiento de la humanidad?

jueves, 20 de febrero de 2014

POSIBILIDAD DEL CONOCIMIENTO



¿Puede el sujeto aprehender realmente el objeto? Esta es la cuestión de la POSIBILIDAD DEL CONOCIMIENTO HUMANO. (El Dogmatismo. El Escepticismo. El Subjetivismo y el Relativismo. El Pragmatismo. El Criticismo)
  • El Dogmatismo: Es aquella posición epistemológica  para la cual todavía no existe el problema del conocimiento. El dogmatismo da por supuesta la posibilidad y la realidad del contacto entre el sujeto y el objeto: la conciencia cognoscente  aprehende su objeto. Esta posición se sustenta en una  confianza de la razón humana, todavía no debilitada por ninguna duda.
El contacto entre el sujeto y el objeto no puede  parecer problemático a quien no ve que el conocimiento representa una relación. No ve que el conocimiento es por esencia una relación ente el sujeto y un objeto. Cree, por el contrario, que los objetos del conocimiento nos son dados absolutamente y no meramente por obra  de la función intermediaria del conocimiento.
Según la concepción del dogmatismo, los objetos de la percepción  y los objetos del pensamiento nos son dados de la misma manera: directamente en su corporeidad.
También los valores existen, pura y simplemente, para el dogmático.
Como actitud de hombre ingenuo, el dogmatismo es la posición primera y más antigua. En el período originario de la filosofía griega domina de un modo casi general. Las reflexiones epistemológicas no aparecen, en general,  entre los presocráticos. Estos pensadores se hallan animados todavía por una confianza ingenua en la capacidad de la razón humana. Vueltos por entero hacia el ser, hacia la naturaleza, no sienten que el conocimiento mismo es un problema. Se plantea este problema por primera vez, son los sofistas.
  • El Escepticismo: ¨Los extremos se tocan¨. El dogmatismo se convierte, muchas veces, en su contrario, en el escepticismo (cavilar, examinar). Mientras aquél considera la posibilidad de un contacto entre el sujeto y el objeto, como algo comprensible de suyo, éste la niega. Según el escepticismo, el sujeto no puede aprehender el objeto. El conocimiento, en el sentido de una aprehensión real del objeto, es imposible. Por eso no debemos emitir pronunciar ningún juicio, sino abstenernos totalmente de juzgar.
El escepticismo se encuentra ante todo en la Antigüedad. Su fundador es Pirrón de Elis (360-270). Según él, no se llega a un contacto entre del sujeto y el objeto. A la conciencia cognoscente le es imposible aprehender su objeto. No hay conocimiento. De dos juicios contradictorios, el uno es, por ende, tan exactamente verdadero como el otro. Como no hay conocimiento ni juicio verdadero, Pirón recomienda la abstención de todo juicio.
El escepticismo radical o absoluto se anula a sí mismo. Afirma que el conocimiento es imposible. Pero con esto expresa un conocimiento. En consecuencia, considera el conocimiento como posible de hecho y, sin embargo, afirma que es imposible. Incurre pues, en una contradicción consigo mismo.
No hay verdad ni certeza, pero sí probabilidad. No podemos tener nunca la pretensión de que nuestros juicios sean verdaderos, sino tan sólo  la de que sean probables.
Por errado que el escepticismo sea, no se le puede negar cierta importancia para el desarrollo espiritual del individuo y de la humanidad. Es, en cierto modo, un fuego purificador de nuestro espíritu, que limpia éste de prejuicios y errores y le empuja a la continua comprobación de sus juicios.
  • El Subjetivismo y El Relativismo: según éstos, hay una verdad: pero ésta tiene una validez limitada. No hay ninguna verdad universalmente válida. El subjetivismo, como ya lo indica su nombre,  limita la validez de la verdad al sujeto que conoce y juzga. Éste puede ser tanto el sujeto individual o el individuo  humano  como el sujeto general o el género humano. En el primer caso tenemos un subjetivismo individual; en el segundo, un subjetivismo general. Según el primero, un juicio es válido únicamente para el sujeto individual que lo formula (para los demás puede ser falso).
El relativismo está emparentado con el subjetivismo. Según él, no hay tampoco ninguna verdad absoluta, ninguna verdad universalmente válida; toda verdad es relativa, tiene una sola validez limitada (la influencia del medio, del espíritu, del tiempo, la pertenencia a un círculo cultural determinado).
El Escepticismo, el Subjetivismo y el Relativismo, se encuentran ya en la antigüedad. Los representantes cásicos del subjetivismo son los sofistas.
El subjetivismo y el relativismo incurren en una contradicción análoga a la del escepticismo. Éste juzga que no hay no hay ninguna verdad, y se contradice a sí mismo.
Una verdad que no sea universalmente válida representa un sinsentido. La validez  universal de la verdad está fundada en la esencia de la misma. La verdad significa la concordancia del  juicio con la verdad objetiva. Si existe esa concordancia, no tiene sentido limitarla  a un número determinado de individuos. Si existe, existe para todos. El dilema es: o el juicio es falso, y entonces no es válido para nadie, o es verdadero y entonces es válido para todos, es universalmente válido.
El subjetivismo y el relativismo son en el fondo, escepticismo. Pues también ellos niegan la verdad, si no directamente, como el escepticismo, indirectamente, atacando su validez universal.
  • El Pragmatismo: Como el escepticismo, también el pragmatismo abandona el concepto de verdad en el sentido de la concordancia entre el pensamiento y el ser. Pero el pragmatismo no se detiene en esta negación, sino que remplaza el concepto abandonado por un nuevo concepto de la verdad. Según él, verdadero significa útil, valioso, fomentador de la vida.
Según el pragmatismo, el hombre no es en primer término un ser teórico o pensante, sino un ser práctico, un ser de voluntad y acción. Su intelecto está íntegramente al servicio de su voluntad y de su acción. El intelecto es dado al hombre, no para investigar y conocer la verdad, sino para poder orientarse en la realidad. Su verdad consiste en la congruencia  de los pensamientos con los fines prácticos del hombre, en que aquellos resulten útiles y provechosos para la conducta práctica de éste. El intelecto no le ha sido dado para conocer la verdad, sino para obrar.
  • El Criticismo: Una posición intermedia entre el dogmatismo y el escepticismo, se llama el criticismo (examinar).
El criticismo comparte con el dogmatismo la fundamental confianza a la razón humana. Está convencido de que es posible  el conocimiento, de que hay una verdad. Pero mientras  esta confianza induce al dogmatismo a aceptar despreocupadamente, por decirlo, así,  todas las afirmaciones de la razón humana y a no reconocer límites al poder del conocimiento humano, el criticismo, próximo en esto al escepticismo, une a la confianza en el conocimiento humano, en general, la desconfianza hacia todo conocimiento determinado. El criticismo examina todas las afirmaciones de la razón humana y no acepta nada despreocupadamente. Dondequiera pregunta por los motivos y pide cuentas a la razón humana. Su conducta no es dogmática ni escéptica, sino reflexiva y crítica. Es un término medio entre la temeridad dogmática y la desesperación escéptica.
En la Antigüedad con Platón y Aristóteles y ente los estoicos;  en Descartes y Leibniz y todavía en Locke y Hume. Sin embargo, el verdadero fundador del criticismo es Kant, cuya filosofía se llama pura y simplemente criticismo. Según él, el escepticismo y el dogmatismo, son posiciones exclusivistas. La una tiene una confianza ciega en la razón humana, la otra, una desconfianza, sin previa crítica. El criticismo supera ambos exclusivismos.
El Criticismo es ` aquel método de filosofar que consiste en investigar las fuentes de las propias afirmaciones y objeciones y las razones en que las mismas descansan, método que da la esperanza de llegar a la certeza`.
En la cuestión de la posibilidad del conocimiento, el criticismo es la única posición justa.

ACTIVIDAD EN EL CUADERNO Y EN CLASE:

Preguntas a Resolver:

1.       Con respecto a la POSIBILIDD DEL CONOCIMIENTO HUMANO, ¿qué plantea El Dogmatismo? ¿Qué es un Dogma?
2.       Con respecto a la POSIBILIDD DEL CONOCIMIENTO HUMANO, ¿qué plantea El Escepticismo?
3.       Con respecto a la POSIBILIDD DEL CONOCIMIENTO HUMANO, ¿qué plantea El Subjetivismo y El Relativismo?
4.       El Subjetivismo y El Relativismo, al negar la validez universal del conocimiento humano,   ¿en qué contradicción caen?
5.       Analice la situación actual de Venezuela, cuando al movimiento social actual se le ha estado denominado  primavera venezolana”, desde el punto de vista del:
-          Dogmatismo
-          Pragmatismo
-          Criticismo

6.       En lo ÉTICO,  cómo es el comportamiento ético - político, desde la perspectiva del:

-          Dogmatismo
-          Escepticismo
-          Pragmatismo
-          Criticismo

7.       En forma general, plantéate la forma  como transcurres en la   vida desde estas perspectivas: ¿Crees y no dudas?, ¿Dudas de todo?  ¿Valoras las cosas de acuerdo al beneficio que obtienes de ellas?, ¿Examinas reflexiva y críticamente tus actos y las cosas?
Para dialogarlo en clase, después de las explicaciones del profesor en la sesión académica, dispuesta para tal fin.
Responde individualmente en el cuaderno, las anteriores preguntas.


domingo, 16 de febrero de 2014

EL FENÓMENO DEL CONOCIMIENTO Y LOS PROBLEMAS CONTENIDOS EN ÉL


La teoría del conocimiento es pues, como su nombre lo indica, una teoría, esto es, una explicación  o interpretación filosófica  del conocimiento humano.

El fenómeno del conocimiento se nos presenta en sus rasgos fundamentales, de la manera siguiente:

En el conocimiento se hallan frente a frente  la conciencia y el objeto, el Sujeto y el Objeto. El conocimiento se presenta como una relación entre estos dos miembros, que permanecen en ella eternamente separados el uno del otro. El dualismo del sujeto y objeto pertenece a la esencia del conocimiento.

La relación entre los dos miembros es a la vez una correlación. El sujeto sólo es sujeto para un objeto y el objeto sólo es objeto para un sujeto.

Ser sujeto es algo completamente distinto que ser objeto. La función del sujeto consiste en aprehender  el objeto, la del objeto en ser aprehensible y aprehendido por el sujeto.

Vista desde el sujeto, esta aprehensión se presenta como una salida del sujeto fuera de su propia esfera, una invasión en la esfera del objeto y una captura de las propiedades de éste. El objeto no es arrastrado empero, dentro de la esfera del sujeto, sino que permanece trascendente a él. No en el objeto, sino en el sujeto, cambia algo por obra de la función de conocimiento. En el sujeto surge una cosa que contiene  las propiedades  del objeto,  surge una imagen del objeto.

Visto desde el objeto, el conocimiento se presenta  como una transferencia de las propiedades del objeto al sujeto.

En el trascender del sujeto al objeto y de éste al sujeto, el objeto tiene el predominio  sobre el sujeto. El objeto es el determinante, el sujeto el determinado. El conocimiento puede definirse, como una determinación del sujeto por el objeto.

Pero lo determinado no es el sujeto pura y simplemente, sino tan sólo la imagen del objeto en él. Esta imagen es objetiva, en cuanto que lleva los rasgos del objeto. Siendo distinta del objeto, se halla en cierto modo entre el sujeto y el objeto. Constituye el instrumento mediante el cual la conciencia cognoscente aprehende su objeto.

El sujeto se conduce receptivamente frente al objeto. Esta receptividad no significa pasividad. Por el contrario, puede hablarse  de una actividad y espontaneidad del sujeto en el conocimiento.

Dividimos los objetos en reales e ideales. Llamamos real todo lo que nos es dado en la experiencia externa o interna  o se infiere de ella. Los objetos ideales se presentan, por el contrario, como irreales, como meramente pensados. Objetos ideales son, por ejemplo,  los objetos de las matemáticas, los números y las figuras geométricas. Estos objetos ideales poseen un ser en sí.

Las leyes de los números, las relaciones que existen, por ejemplo, entre los lados y los ángulos de un triángulo, son independientes de nuestro pensamiento subjetivo, en el mismo sentido en que lo son los objetos reales.

El concepto de verdad se relaciona estrechamente con la esencia del conocimiento. Verdadero conocimiento es tan sólo el conocimiento verdadero. Un ¨ conocimiento  falso¨ no es propiamente conocimiento, sino error e ilusión. Más ¿en qué consiste la verdad del conocimiento? Según lo dicho, debe radicar en la concordancia de la imagen con el  objeto. Un conocimiento es verdadero si su contenido concuerda con el objeto mentado. El concepto de verdad, según esto, el concepto de una relación. Expresa una relación, la relación del contenido del pensamiento, de la ¨imagen¨ con el objeto.

Pero no basta que un conocimiento sea verdadero; necesitamos poder alcanzar la certeza de que es verdadero. Entonces, ¿En qué podemos conocer si un conocimiento es verdadero? Es la cuestión del criterio de la verdad.

En el fenómeno del conocimiento humano se presentan tres esferas distintas: el sujeto, la imagen y el objeto.

 Por el sujeto, el fenómeno del conocimiento toca con la esfera  psicológica; por la imagen, con la lógica; por el objeto, con la ontológica.  La Psicología dirige su mirada al  origen y curso de los procesos psicológicos. Pregunta cómo tiene lugar el conocimiento, pero no si es verdadero, esto es, si  concuerda con el objeto. La cuestión de la verdad se halla fuera de su alcance. Si incurriese en ello, incurriría en un error del psicologismo.

La ¨imagen¨ del objeto en el sujeto es un ente lógico y, como tal, objeto de la lógica. Pero la lógica no puede resolver el problema del conocimiento. La lógica investiga  los entes lógicos como tales, su arquitectura íntima, la concordancia del pensamiento consigo mismo, no su concordancia con el objeto. Se caería en el logicismo.

El objeto hace frente a la conciencia como algo que es –trátese de un ser ideal o de un ser real- . El ser, por su parte,  es objeto de la ontología. Pero la ontología no puede resolver el problema del conocimiento. Así como no puede eliminarse el sujeto, tampoco el objeto. Cuando se desconoce esto  y se ve el problema del conocimiento, el resultado es la posición del ontologismo.

Ni la psicología, ni la lógica,  ni la ontología pueden resolver, según esto, el problema del conocimiento.

 

Problemas contenidos en el conocimiento humano:

  • ¿Puede el sujeto aprehender realmente el objeto? Esta es la cuestión de la POSIBILIDAD DEL CONOCIMIENTO HUMANO. (El Dogmatismo. El Escepticismo. El Subjetivismo y el Relativismo. El Pragmatismo. El Criticismo)
  • ¿Es la Razón o la experiencia la fuente y  base del conocimiento humano? Esta es la cuestión del ORIGEN DEL CONOCIMIENTO HUMANO. (El Racionalismo. El Empirismo. El Intelectualismo. El Apriorismo)
  • ¿Es el objeto el que determina al sujeto, o el sujeto al objeto? Es la cuestión de la ESENCIA DEL CONOCIMIENTO. (El Objetivismo. El Subjetivismo. El Realismo. El Idealismo. El fenomenalismo.
  • ¿Además de un conocimiento racional hay un conocimiento de otra especie, un conocimiento intuitivo, en oposición al  discursivo racional. Es la cuestión de  LAS FORMAS DEL CONOCIMIENTO HUMANO.
  •  Si hay un conocimiento verdadero, ¿En qué podemos conocer esta verdad?  ¿Cuál es el criterio que nos dice, en el caso concreto, si un conocimiento es o no verdadero? 

 

NOTA ACLARATORIA PARA LOS ESTUDIANTES: Estos problemas que plantea el conocimiento humano, los iremos desarrollando paulatinamente en las siguientes sesiones académicas.